9 de julio de 2011

SUERTE DESIGUAL PARA EL TRIO DE GRUPOS BRITANICOS EN EL BILBAO BBK LIVE

Lugar: Kobetamendi
Público: 30000 personas
08/07/2011

Tres grupos británicos eran los encargados de ser los principales artistas de la segunda jornada del Bilbao BBK live. Tras los problemas que le hizo suspender la gira a la cabeza de cartel de este día, Amy Winehouse, el día se quedaba un tanto cojo y la organización decidió sacarse de la manga a los británicos Suede para así tener un trio de grupos británicos variopinto.

A las 21:45h. en el escenario nº2 el grupo de Leicester, Kasabian, irrumpía en el escenario con fuerza sonando con uno de sus mejores temas Club Foot con esa linea de bajo tan penetrante. Para dentro de un par de meses tienen previsto publicar su cuarto disco de nombre inicial Velociraptor. Sus tres primeros temas fueron un subidon constante y el público estaba entregado a ellos. Fueron bajando poco a poco de intensidad a pesar de que su cantante Tom Meighan no paro un momento de animar al publico. No se olvidaron de tocar temas tan conocidos como Underdog y volvieron a recuperar a un publico con muchas ganas de fiesta con la canción Fast Fuse y que en la parte final la juntaron con la conocida canción de la banda sonora de Pulp Fiction Misirlou de Dick Dale. A partir de esta canción nuevamente el público volvía a comer de la mano del grupo y coreaba todas sus canciones en un final de concierto apoteósico que lo acabaron con la magnífica Fire ante la histeria del público que abarrotaba el recinto del concierto. Destacable concierto de una gran banda en directo.

A las 23:00h. el grupo de Brett Anderson , los reunificados Suede, saltaban al escenario. La primera fue The Hollywood Life y desde el principio su carismático líder dejo claro como iba a ser el concierto. Con una banda en un segundo plano sin muchas florituras y cada uno haciendo su trabajo dejando todo el escenario para que saltara, corriera y lanzara el micro Brett Anderson. Brett es un frotman muy pasional y pone mucha energía al interpretar sus letras (se tira por el suelo, se arrodilla). No tardaron mucho en entonar sus mejores canciones como Trash o la fantástica y rockera Animal Nitrate, sin olvidarse de We are the Pigs. Brett Anderson estaba desbocado y no paraba de moverse por el escenario ante un público tal vez algo frió y distante que no mostraba mucho entusiasmo. Cuando Brett intentaba que el público cantase practicamente ni se le oía. Lo que dejaron claro Suede en su concierto como cabezas del cartel del día tras la baja forzosa de Amy Winehouse es que este grupo no sería absolutamente nada sin Brett Anderson que es un animal escénico y que su música pasaría más que desapercibida si no fuese por su frotman. Concierto correcto aunque algo irregular con excesivos tiempos muertos para cantar canciones más tranquilas como By the Sea con fallidas puestas en directo (no sonó muy bien uno de sus grandes éxitos So Young). Para terminar y ya en los bises otra canción relajada Saturday Night en la cual bajo del escenario para estrechar unas cuantas manos y saludar. No cabe duda, que a pesar de los pesares, Suede pegaban más en el cartel de este día con clara influencia del rock británico que la cantante del moño imposible.

Empezaban a caer las primeras gotas de lluvia cuando saltaron por segunda vez en este festival ( ya estuvieron hace 2 años) el grupo británico Kaiser Chiefs. No lo dudaron un minuto y tras una pequeña intro instrumental atacaron con fuerza con uno de sus himnos de rock hooligan Every Day I Love You Less and Less. Este concierto fue otra demostración más de de energía, presencia y simpatía sobre el escenario de Ricky Wilson. No paro ni un momento de correr por el escenario, hablar con el publico, bromear con los cámaras de televisión en un concierto más relajado que en su anterior visita y posiblemente menos sorprendente. Venían a presentar nuevas canciones de su disco The Future is Medieval pero seguían sonando grandes canciones e himnos del grupo como la esperadísima Ruby muy coreada y aplaudida por el público que aguantaba estoicamente la lluvía que cada caía con más fuerza. No se olvidaron de tocar otros temas como I Predict I Riot en el cual como hizo hace dos años saltó al foso para estar con la gente, subirse a las barandillas y estrechar unas cuantas manos. En este concierto si estaba disfrutando la gente.
Posiblemente esta banda no llegue a tener el éxito que tuvo hace 4 o 5 años pero sus directos son sorprendentes, divertidos y entretienen para todo tipo de personas. Para el final y para despedirse de su público Oh! My God dejando al público satisfecho.




1 comentario:

Aitor dijo...

Kasabian estuvieron bien aunque no me llegan a enganchar del todo, Suede levanto el concierto el cantante que estuvo entregado y Kaiser Chiefs estuvieron mas sosos que hace dos años.